Huevos con Chorizo

Igual te estás preguntando cómo he elegido esta receta.
Igual piensas que no es muy saludable.
Bueno, te invito a que rompas tus paradigmas sobre comida y salud.
La salud, en lo referido a alimentación, bajo mi punto de vista, engloba muchas cosas.
Y una de ellas es imperceptible a los ojos, pero impactante en el alma.
La intención proyectada sobre los alimentos.
Al ser imperceptible, podríamos no entenderla racionalmente, pero esto no tiene que ver precisamente con el raciocinio, aun así trataré de explicarlo como lo siento.
Este plato tiene que ver con un recuerdo muy bonito.
Era pequeño, 6 o 7 años.
No tengo claros los detalles en mi memoria mas allá de lo que me han contado mis padres.
Pero tengo algo grabado a fuego.
Yo, sentado en un taburete de la cocina de mis abuelos al lado de mi hermano pequeño.
Y mi abuelo preparando unos huevos con chorizo.
Resulta que mi madre estaba ingresada en el hospital, mi padre y mi abuela la acompañaban, fue algo imprevisible, con lo que nos quedamos a cargo de mi abuelo ese día.
Entre otras cosas mi abuelo tuvo que hacernos de comer.
Nunca en su vida había cocinado.
Nada de nada.
Imaginaros la escena.
El a cargo de dos niños y teniendo que hacer algo que jamás había hecho.
Recuerdo como si fuera ayer su cara.
Susto.
Pero también recuerdo su voluntad, su cariño, su entrega, su cuidado, su afán.
Y también recuerdo su cara de profunda satisfacción al decirle que eran los mejores huevos que habíamos comido nunca.
¡Qué momento!
Cuanto amor y ternura siento al recordarlo.
¿Vosotros creéis que esos huevos con chorizo no estaban cargados de algo que difícilmente ningún superalimento del mundo podría igualar?
¿De verdad ese plato no es ambrosia para el cuerpo y el alma?

Fer